El lanzamiento de Toyota en Estados Unidos del impronunciable bZ4X EV ha tenido un comienzo difícil con el fabricante de automóviles, anunciando el jueves un amplio retiro del vehículo apenas dos meses después de su debut, debido a una situación potencialmente mortal que podría llevar a que las ruedas del vehículo se separen mientras se conduce a gran velocidad.
Unos 2.700 de los crossovers eléctricos están sujetos al retiro: 2.000 destinados al mercado europeo, 260 a los Estados Unidos, 110 a Japón y 20 a Canadá. La compañía implora a los propietarios que estacionen sus vehículos de inmediato y no reanuden su conducción hasta que se pueda idear una solución más “permanente”.
“Nadie debe conducir estos vehículos hasta que se realice el remedio”, dijo Toyota en el aviso del jueves. “Después de un uso de bajo kilometraje, todos los pernos del cubo en la rueda pueden aflojarse hasta el punto en que la rueda puede desprenderse del vehículo. Si una rueda se separa del vehículo mientras conduce, podría resultar en una pérdida de control del vehículo, lo que aumenta el riesgo de un choque. La causa del problema y los patrones de conducción bajo los cuales podría ocurrir este problema aún están bajo investigación”.
Subaru ha emitido un retiro similar para aproximadamente 2,600 vehículos eléctricos Solterra. Estos vehículos eléctricos son funcionalmente idénticos al bZ4X y se producen en las mismas líneas en las instalaciones de Toyota en Motomachi. Todavía no se sabe cuándo los ingenieros de Toyota podrían tener una solución para el problema.
