Es el final de una era en la compañía anteriormente conocida como Facebook. Sheryl Sandberg renunció oficialmente como Directora de Operaciones el 1 de agosto, según lo revelado por una presentación de la SEC notificada por TechCrunch. En la presentación, Meta dijo que Javier Olivan es ahora el COO de la compañía y que Sandberg solo seguirá siendo un empleado hasta el 30 de septiembre. Después de eso y en el futuro, Sandberg servirá como miembro de la Junta de Meta y recibirá una compensación como director no empleado.
Sandberg anunció por primera vez que dejaba su papel como COO de Meta después de 14 años a principios de junio. Mark Zuckerberg reveló en ese momento que Olivan asumirá el papel de COO, pero que sus responsabilidades serán diferentes a las de Sandberg. Olivan tendrá un “rol de COO más tradicional donde [él] se centrará interna y operativamente, basándose en su sólido historial de hacer que nuestra ejecución sea más eficiente y rigurosa”, dijo el CEO de la compañía.
Como señaló The Wall Street Journal en un artículo sobre Sandberg en junio, se unió a Facebook en 2008 y dirigió el lado comercial de la compañía, lo que permitió a Zuckerberg centrarse en el trabajo de ingeniería. En años más recientes, se convirtió en la cara de la red social cuando se trata de liderar la respuesta pública a controversias, como el escándalo de Cambridge Analytica.
Antes de que Sandberg anunciara su partida, The Journal informó que el COO de Meta utilizó recursos de la compañía para ayudar a eliminar los informes negativos sobre el CEO de Activision, Bobby Kotick, con quien estaba saliendo en ese momento. A mediados de junio, la publicación también informó que los abogados de Meta están investigando el uso de Sandberg de los recursos y empleados de la compañía para su fundación y para promover su libro Opción B.
Sandberg deja la compañía justo cuando ha comenzado a prepararse para “tiempos serios”. En una reunión con empleados, Zuckerberg reveló que Meta está experimentando “una de las peores recesiones [que ha visto] en la historia reciente”. Como resultado, Meta tuvo que reducir su número objetivo para nuevos ingenieros este año. Además, según los informes, el liderazgo de la compañía les dijo a los gerentes que identificaran a los de bajo rendimiento y que “se movieran para salir” de ellos si no podían volver a la normalidad.